Reunidos en la noche de ayer lunes 12 de noviembre, la junta de oficiales de la Agrupación de Cofradías, en sesión ordinaria, decidió otorgar el premio Cofrade Manolo Ramírez en la edición 2019 a Antonio Crespillo Guardeño.

El lucentino Antonio Crespillo Guardeño es licenciado en Ciencias Químicas, por la Universidad de Córdoba y profesor de enseñanza secundaria; tiene avalados sus méritos cofrades por una vida de dedicación a María Santísima de Araceli y a la Cofradía del Stmo. Cristo del Amor y María. Stma. de la Paz (Campanitas), a la que pertenece desde los trece años.

A partir de 1989 forma parte de la junta de gobierno de la hermandad, centrando su dedicación a trabajos en la mayordomía y estación de penitencia, así como en la vocalía de difusión y propaganda (en una primera etapa), para asumir posteriormente la secretaría desde 1997 hasta 2001, que compatibilizaría con sus labores de director de la revista Campanitas.

Desde 2001 hasta 2007, y coincidiendo con la etapa en la que ocupa el cargo de hermano mayor, acomete una serie de medidas encaminadas a desarrollar el patrimonio cultural de la Cofradía del Amor, entre las que cabe destacar, la restauración de la capilla-sagrario, donde se encuentran los titulares de la hermandad.

Asimismo, merece mención destacada su activa dedicación en la restauración del Misterio completo de la Crucifixión, la reforma de la casa hermandad y del trono del titular de la cofradía.

Foto: paseillo.es