Las cofradías lucentinas vuelven a mostrar su patrimonio en las IV Jornadas de Puertas Abiertas de Casas de Hermandad

11 de Febrero del 2018

Las cofradías y hermandades lucentinas han mostrado hoy domingo su rico patrimonio en la IV Jornada de Puertas Abiertas.
 
La Banda de Música de Lucena, la Agrupación Musical del Stmo. Cristo de la Humillación y la Hermandad de Tambores de Lucena, iniciaban a las 11:30 horas desde el llanete de San Francisco el pasacalles, que continuaba por el siguiente recorrido: San Francisco, Viana, Mesón, Las Tiendas, Juan Palma, La Villa, Plaza Alta y Baja, Veracruz, Peñuelas, Jerónimo Medina, Santiago, Ancha, Ballesteros, El Coso, Antonio Eulate, Párroco Joaquín Jiménez Muriel, Maquedano, El Coso, Santa Catalina, Las Torres, El Peso, Curados, Juan López Baja, Tamborilera, Cabrillana, LLorente el Ciego, Juan Blázquez y Recinto Ferial.
 
Los miembros de las propias hermandades eran los encargados de describir la historia y patrimonio de las mismas a los visitantes que acudían a esta cita, que la Agrupación de Cofradías ha convertido en la antesala de nuestra Cuaresma.
 
La Cofradía del Amor ha elegido este día para presentar en su sede la nueva imagen de Cristo Crucificado que recibe la advocación del Stmo. Cristo del Remedio de Ánimas.
 
Ante la imposibilidad de llevar a cabo el proyecto de incorporar a su patrimonio la imagen del Crucificado  de la Misericordia “Cristo de los Camisitos”, el Hermano de Honor de esta Cofradía, Francisco Granados Ortega, ha donado esta imagen realizada por el escultor lucentino Daniel García Berlanga.
 
El Santísimo Cristo del Remedio de Ánimas es una talla de estilo Neobarroco, que el escultor culminó a finales del verano del pasado 2017. La talla, a pesar de la expresión realista del martirio del Señor, no difiere de la tradición escultórica de las escuelas andaluzas del siglo XVII y XVIII.
 
La imagen representa a Cristo tras recibir la lanzada de Longinos, con el cuerpo caído y manteniendo la verticalidad. Las heridas y laceraciones de la espalda y piernas, fruto de la flagelación a la que fue sometido, las distintas llagas en rodillas, dedo pulgar y costado, nos presenta una imagen con un dramatismo cruento, sin llegar a ser sindónico, que mueve a la devoción reflejando un profundo realismo traumático. A la vez, el Señor refleja paz en la serenidad de su rostro, envolviendo al creyente en una sensación de divina majestad.
 
La nueva imagen se encuentra sobre el trono del Misterio de la Crucifixión. El Cristo recibirá culto en la sede de la propia hermandad, que celebrará anualmente un Vía Crucis por las calles del barrio, en la Festividad de los Fieles Difuntos.
 
Imágenes de la IV Jornada de Puertas Abiertas de Casas de Hermandad: VER AQUÍ
 
 
 
Foto: paseillo.es

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