Un grupo de jóvenes recupera la imagen de Ntra. Sra. de la O para la Parroquia del Carmen

27 de Julio del 2020

Un grupo de jóvenes de Lucena presentó ayer, domingo 26 de julio, al inicio de la Santa Misa de las 20:00 horas, la imagen de Ntra. Sra. de la O, tras haber sido retirada del culto para su restauración.

La Agrupación Parroquial, que se encuentra en proceso de fundación, promovida por este grupo de jóvenes de la feligresía de la Parroquia de Ntra. Sra. del Carmen, eligió esta imagen letífica, presentada a los fieles en uno de los retablos de la parroquia, para realizar cultos internos, como la adoración al Santísimo y a la Bendita Virgen.

Los orígenes de la devoción a la Virgen de la O en Lucena se remontan al primer tercio del siglo XVI, cuando el lucentino Juan Sánchez de Villarreal vence al pirata Barbarroja el 18 de diciembre de 1518. Agradecido a la Santísima Virgen por su victoria, decidió mandar a construir una ermita en un olivar de su propiedad en la Calzada, y dedicarla a la advocación de la Expectación, que en ese día se celebraba.
La Ermita de Nuestra Señora de la O se levantaba junto al Hospital de San Juan de Dios y estaba presidida por la imagen de Nuestra Señora, que ocupaba el camarín y retablo principal, labrado por artistas de la talla de Francisco José Guerrero, uno de los más destacados retablistas del XVIII, así como por Pedro de Mena Gutiérrez.
Con el paso del tiempo, el estado ruinoso de la ermita obligó a trasladar a la imagen junto a todos sus enseres hasta la Parroquia del Carmen, languideciendo la hermandad que la veneraba desde antes de 1562 y derribándose final y tristemente su ermita.
Como curiosidad, la imagen de la Virgen de la O que podría enmarcarse en la segunda mitad del siglo XVI, se presentaba en cinta durante buena parte del año, apareciendo con el Niño Jesús en sus brazos el día de Navidad.

La restauración promovida por el grupo de jóvenes, ha sido acometida por el lucentino Manuel Espejo Mármol, contando con Miguel Ángel Sánchez Jiménez en el equipo de trabajo y bajo la coordinación de Francisco José Sánchez Concha, integrándose la misma dentro del Grupo de Investigación HUM - 476 de la Universidad de Sevilla.

La restauración se ha centrado en la recuperación de la policromía y el aspecto que poseía la imagen desde el siglo XVIII, oculto tras gruesas capas de repintes de calidad sintética y cosméticos aplicados en una intervención anterior, en la que no se siguieron los criterios ortodoxos y respetuosos con la obra original que exigen las Cartas del Restauro, produciéndose numerosos y profundos daños irreversibles en la imagen, que se sumaron a los que previamente presentaba ocasionados tanto por el paso del tiempo como por su carácter funcional, y que ahora han sido subsanados.

El proceso de conservación y restauración, ha permitido conocer bajo el repinte la existencia de cuatro policromias aplicadas en distintas épocas sobre la imagen, pudiéndose datar la última, anacarada y de mayor calidad técnica que las anteriores, en el siglo XVIII, cuando la imagen sería sometida a una profunda intervención que le confiere el aspecto que presenta actualmente. Es en ese momento cuando se añadirían los ojos de cristal y se revestiría el candelero con nuevos lienzos encolados y ornamentados con motivos vegetales al gusto de la época.

El proceso ha consistido en:
- Análisis fotográfico documental y con fluorescencia inducida con luz ultravioleta.
- Estudio de las características técnicas/materiales de la imagen.
- Limpieza químico-mecánica de repintes.
- Limpieza mecánica de empastes de calidad sintética.
- Fijación de levantamientos en la policromía con riesgo de desprendimiento.
- Extracción de elementos metálicos.
- Cierre de ensambles, grietas y fisuras.
- Consolidación de las telas encoladas que revisten el candelero.
-Tratamiento preventivo ante ataques de insectos xilófagos.
- Reintegración del soporte.
- Reintegración de la preparación y la policromía.
- Sustitución de los brazos articulados por un nuevo sistema funcional de articulaciones de bola.
- Sustitución del sistema de cogida de la corona por otro funcional y extraible.
- Protección final
- Restitución de pestañas postizas de pelo natural.

La imagen de Ntra. Sra. de la O regresaba a su parroquia tras tres meses retirada del culto, vistiendo terno de seda verde brocado en plata y guarnecido con pasamanería de hojilla de oro y plata del siglo XVIII -de la Virgen del Rosario (Parroquia de Santo Domingo de Guzmán)-, encajes de Bruselas y punto de Duquesa del XIX, corona y cetro del siglo XVIII -de la Parroquia de Ntra. Señora del Carmen-, media luna, puñetas y andas -de la Cofradía del Amor- y piezas de candelería cedidas por la Hermandad de la Soledad. Se ha tomado como base para el atavío un antiguo grabado fechado en 1838 de Nuestra Señora de la O.

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Foto: paseillo.es


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