Negra espesura que tiñe Lucena
Soledad negra de negro caminar oscura
negro manto, negra saya, negra pena,
negra soledad de muerte y de amargura.
Cerca de ti, mi Madre, mi tesoro
vacío mi corazón, en la palabra espera,
confuso y aturdido vago sólo
incrédulo del fin que se presenta.
Tanto Amor por siglos derramado
en el sentir impávido de un pueblo
que salva a Barrabás de su pecado
y condena al Buen Pastor al vil tormento.
Te has ido, oh Jesús, y me has dejado
solo en la Soledad de mi bajeza,
he sido otro Longinos despechado
también clavé en tu pecho mi tristeza,
y el mío traspasé con la mentira
con la daga del rencor y la indolencia,
de ahí mi alma llora arrepentida
pidiendo tu perdón y tu clemencia.
Me sumo en la plegaria a mi Lucena
que lenta por sus calles procesionas
del Sábado Tú Madre eres la Reina
Soledad para tu pueblo eres Aurora.
Jurado García, J.C., Pregón de Semana Santa 2012, Agrupación de Cofradías, pp. 67 y 68.
Foto: paseillo.es
