En la Parroquia de Santiago Apóstol a las 21:15 horas de ayer viernes, Juan Mangas Jiménez presentaba a su hija Lourdes en su primer pregón, destacando su pasión por la santería, la defensa de nuestras tradiciones y su devoción al Cristo de la Columna y María Stma. de Araceli. Lourdes está finalizando su carrera universitaria de derecho, ha colaborado en varias publicaciones cofrades y participa de forma activa en redes sociales y su propio blog.

Lourdes Mangas del Pino, que emocionada dedicó el vigésimo quinto pregón de Santa Teresa a su abuela, comenzaba su intervención en la que ensalzó a la Santa de Ávila, con un saludo de amor fraterno.

La pregonera agradecía el nombramiento para esta labor, que le ha acercado a una de las figuras más fascinantes de la historia de nuestra religión. Fruto de este acercamiento, Lourdes Mangas destacó de Santa Teresa que fue una mujer libre, independiente y con una fuerte determinación para emprender grandes proyectos. La enseñanza básica de la lectura y la fundación de diecisiete conventos durante sus últimos veinte años de vida contrastaba con las trabas de la Inquisición y las contrariedades que recibió de su propia congregación Carmelita.

Lourdes resaltó la labor de la familia Luna Muñoz, que desde los años ochenta ha sido el pilar fundamental de la cofradía que venera a Santa Teresa y alentaba a la cuadrilla de Juan Collado para su santería. “Es vuestro deber demostrar a la cofradía que la voluntad empleada en el embellecimiento de cada factor aglutinador en torno a Santa Teresa no es en vano”.

La idolatría con oraciones a esculturas, la figura de las monjas de clausura y las declaraciones del Obispo de Córdoba sobre la ideología de género, son aspectos actuales que deben ser revisados por los creyentes y las autoridades públicas eclesiásticas, bajo el punto de vista de la pregonera. “El acto literal de la apertura de la Iglesia debe hacerse desde la posición que Jesús adoptaría si hoy estuviera físicamente entre nosotros”.

“Su trabajo al frente de la Orden del Carmelo Descalzo, que con sufrimiento, desvelo y esperanza fundó, es hoy una comunidad que acoge a 11.500 monjas, 4.000 frailes y 40.000 Carmelitas Descalzos Seglares en los más de 1.400 conventos dispersados por los cinco continentes”. Mangas destacó la impagable ofrenda que Santa Teresa, sin ser consciente dejó a la humanidad.

“Tened presente que vuestra Fe debe prevalecer en la consecución de vuestras intenciones, pues suceda lo que el devenir quiera, la lucha por vuestras esperanzas debe ser el fruto que alimente vuestro espíritu”. Con esta dedicación especial a las mujeres, concluía el pregón que Lourdes Mangas ofreció a Santa Teresa de Jesús.

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Foto: paseillo.es