Finalizada la eucaristía e imposición de ceniza que tenía lugar esta tarde a las 20:00 horas en el templo de San Pedro Mártir, se presentaba el trono de María Stma. del Socorro tras su restauración en el taller local de Orfebres Gradit.

 

Con la decidida intención de no descuidar el mantenimiento del rico patrimonio de la archicofradía, se ha acometido este proceso de restauración, para devolver su esplendor, ya que el trono presentaba deficiencias en el plateado y barniz de cartelas y molduras. Desde el año 1973 que se realizara este trono en la Casa Angulo, no había sufrido transformaciones, arreglos o limpiezas en profundidad.

 

El trabajo comenzó con el desmontaje de cartelas, medallones, escudos, molduras, etc., tanto de la canastilla, peana, varales de palio y candelabros de cola, así como los casquetes de los varales y los asones. Posteriormente se procedió a decapar las piezas, eliminar rastros del antiguo baño de plata y tras su limpieza y pulido, aplicar un nuevo baño de plata de ley, para finalmente montar de nuevo todas las piezas.

 

Además de la restauración, el paso de Ntra. Señora del Socorro se ha enriquecido con una nueva candelería, ocho jarras, seis violeteros y crestería que remata las bambalinas. Todas estas piezas se han realizado según los diseños de Javier Aguilar, diseñador de Orfebres Gradit.

 

La candelería es de estilo neobarroco, con pie triangular repujado con motivos vegetales, y un medallón central con el escudo de la venerable archicofradía. Macolla cincelada con gallones, y un fuste muy clásico, cónico acanalado y con un sobrepuesto de guirnaldas cinceladas a base de flores y telas. La parte superior esta cincelada haciendo juego con la macolla a base de gallones rectos.

 

El juego de jarras y violeteros tienen un diseño original y exclusivo, del mismo estilo del resto de los enseres del paso, con una forma muy abombada, resaltando la movida silueta de la pieza, cincelada con unas hojas de acanto y unos medallones centrales con el escudo de esta institución religiosa. Se han incorporado unas originales asas con mucho movimiento y detalles de hojarascas cinceladas, cintas y pináculos. Estas piezas han sido donadas por devotos de Nuestra Señora del Socorro.

 

Destaca de la nueva crestería, que sustituye a la anterior de escasa calidad, los medallones centrales de corazón y cincelado de aguas biseladas.

 

También ha sido restaurado el parigolón y se ha sustituido el armazón de la canastilla que era de hierro, por una más robusta, de mayor calidad y más ligera en aluminio. También se han sustituido las chapas de protección de acero inoxidable de la madera y se ha colocado una plancha de acero inoxidable para la recogida de la cera en el trono.

 

La Venerable Archicofradía destacaba el trabajo de Orfebres Gradit y de los integrantes del grupo de mayordomía. Del mismo modo agradecía la colaboración en los trabajos realizados en la madera a Francisco Hurtado Sánchez, José María Ruiz Pacheco y Manuel Navarro Moreno, así como las nuevas piezas de acero inoxidable realizadas por FM Calefacción.

 

La Virgen del Socorro procesiona en un paso de palio desde el año 1923, siendo quizás la primera dolorosa en hacerlo de esta manera en nuestra ciudad.

 

El primer trono en el que porcesionó fue realizado por la madrileña “Casa Meneses”, de estilo neogótico, siguiendo las formas del que había estrenado el Señor en el año 1907. En el año 1973, bajo el mandato de D. Juan Palma Garzón, la Virgen estrenaría el trono hoy presentado, de estilo neobarroco y realizado en los talleres lucentinos de la Casa Angulo. Fue su primer cuadrillero D. Rafael Serrano Ruiz y tuvo el honor de ser su primer manijero D. Felipe Carrera Moreno.