El protagonismo en este Viernes de Cuaresma ha radicado en la Parroquia de San Mateo Apóstol, desde las diez de la mañana, cuando comenzaba el Besapiés a Ntro. Padre Jesús en su entrada a Jerusalén y el Besamanos a Ntra. Señora de los Dolores “Servitas”, acto donde se han congregado cientos de devotos de ambas Imágenes que piadosamente se han acercado a besar y rezar ante Ellas. Ambas Imágenes se encontraban a los pies del Presbiterio, sobre sendas peanas y como telón de fondo el dosel de María Stma. de Araceli, que aguarda su bajada en romería el próximo Domingo de Resurrección.
Con el mismo respeto, seriedad y solemnidad de siempre, de este mismo Templo, a las once de la noche la Cofradía del Stmo. Cristo de la Salud y Misericordia (Silencio), comenzaba su tradicional Vía Crucis, abriendo el cortejo la Cruz de Guía con sudario, flanqueada por los dos antiguos faroles de guía de esta Cofradía y seguidos por dos largas filas de hermanos de vela y tambores enlutados. La Imagen de Cristo fue portada por cuatro hermanos y custodiada por cuatro mujeres, miembros de esta Corporación que alumbraban con antorchas.
El recorrido donde se fueron desgranando las Estaciones del Vía Crucis, transcurrió por Plaza Nueva (lateral sur), Las Torres, San Pedro, donde la Sagrada Imagen paró ante la Capilla de Ntro. Padre Jesús Nazareno, José de Mora Romero, El Peso, Martín Alonso, Catalina Marín, Muleros, Cabrillana, El Agua, Canalejas, Juan Palma y entrada en Su Templo.
Foto: Paseillo