02 de Junio del 2014
Pero cuando junio, cálido y alegre, vaya apareciendo en nuestras calles y plazas, empezaremos a percibir el inminente regreso de Nuestra Bendita Patrona hasta su Santuario. Este pregonero siempre compara el sentimiento de nostalgia que los humanos sentimos cuando nos encontramos lejos de casa, con la vuelta de Nuestra Señora hasta la cumbre serrana. En Lucena ha estado cincuenta días siendo visitada y agasajada por sus hijos, pero imagino yo, que también Ella estará ilusionada con el regreso y la tranquilidad de su hogar.
La luna se fue a dormir
al pie de una vieja encina.
Nació la mañana blanca
el día de la despedida.
El aire llevaba risas,
con trajes de faralaes
iban llegando las niñas.
¡Salió tan guapa
en trono de romerías!
Sus manos eran de fresa,
su sonrisa de ambrosía,
de rosa y de miel sus labios,
de azucenas sus mejillas.
Y el Niño que está en sus brazos
de Lucena es alegría.
Rocío de brisa fresca,
subiendo de las marismas,
cala con su amor al pueblo
el día de
La misma Madre de Dios,
la que nos trajo al Mesías,
paseada por los hombros
de estos hijos de María.
El Sol juega con el Niño
cuando pasan cada esquina
mientras el pueblo le canta
cautivado en sus sonrisas.
Cuando gira
en
un fandango de Lucena
rompe con su melodía
la nostalgia y el silencio
de tan amarga partida.
Más cuando el pueblo la toma
por el caminito arriba,
vuelve al cortejo romero
el canto y la algarabía.
Los gorrioncillos del campo
van llevando la noticia.
¡Que lo sepa todo el mundo,
las tierras de Andalucía!
¡Vuelve Araceli a su trono
de
Pedro del Espino Gómez (Pregón de las Glorias de María Stma de Araceli, 2010)
Pueden ver galería en: http://paseillo.es/galeria/album/72157644554618619
Foto: Paseillo