09 de Octubre del 2020
La Venerable Cofradía de María Stma. de la Aurora inició ayer los actos en honor a su titular, que se desarrollarán a lo largo del mes de octubre.
A las 21:00 horas en la Ermita de la Aurora, la hermandad presentó el camarín de su titular tras el proyecto de restauración, realizado durante los meses de junio, julio y parte de agosto, por parte del Centro de Conservación y Restauración CECORE.
El equipo de CECORE, formado por José Daniel Henares Paredes, coordinador del equipo, Clara Dupuydauby de la Cueva, Inés Piqueras Rubio, Julián Muñoz Bujalance y Antonio Muñoz Navarro, ofrecieron una conferencia en la que explicaron todo el proceso de restauración y conservación del camarín, cuyo estado era muy deficiente.
La Ermita de María Stma. de la Aurora, bendecida en 1715, ha sufrido durante años los daños del paso del tiempo, siendo insuficientes las mejoras para su restauración, debido a los escasos recursos con los que ha contado la hermandad. Debido al estado en el que se encontraba la ermita y aún más determinante el deterioro del camarín, la Junta de Gobierno decidió acometer sin demora la recuperación, de esta obra del S. XVIII, que alberga la bellísima imagen de María Stma. de la Aurora.
Los componentes de CECORE explicaron la importancia de un análisis de diagnóstico para realizar la correcta intervención al camarín de María Stma. de la Aurora. Este proceso constó de una estratigrafía (análisis bajo microscopio de los estratos que componen el grueso de la policromía original y añadida), irradiación UV (Análisis visual de repintes y añadidos, así como material auxiliar para limpiezas, test de solubilidad (Analizar la tipología de repintes y resinas añadidas, y determinar la técnica adecuada de eliminación) y documentación gráfica (Testimonios gráficos con diferente iluminación del estado original, proceso y estado final).
El tratamiento de conservación curativa y preventiva han sido los de mayor importancia en esta intervención, aunque sea la menos visible. Estos tratamientos frenan el problema y ponen solución al mismo, para que no se vuelvan a repetir. Los tratamientos realizados han constado de:
- Consolidación de las yeserías: En el que se han consolidado los elementos de soporte que presentaban disgregación a causa de la exfoliación de sales, fruto de la humedad por infiltración, condensación y capilaridad. Con ello, se ha aportado fuerza, cohesión interna y saturación del poro, restando absorción al material. Se han realizado dos tipologías de consolidaciones, una muy penetrante, de base de silicato aplicada con solventes apolares, y otra más superficial pero más intensa, a base de resina acrílica específica a través de solventes cíclicos.
- Fijación de la policromía: La policromía se ha fijado mediante adhesivo acrílico, aplicándolo de manera puntual, empleando la acción controlada de presión y calor. Igualmente, se ha centrado en la conservación de la policromía de los querubines y las cartelas, elementos que presentaban desprendimientos, cuarteados, y falta de fijación de la policromía al soporte.
- Renovación del sistema eléctrico: Eliminación del cableado antiguo, que discurría sobre las yeserías, y sustitución de la iluminación, por un sistema led, que evite la emisión de calor sobre la obra.
- Desinsectación curativa y preventiva de la puerta: Se ha aplicado un tratamiento curativo y preventivo de insectos xilófagos. La puerta ha tenido el mismo tratamiento que el resto de la estancia.
Los tratamientos de restauración realizados han sido:
- Recuperación de las pinturas murales originales: Eliminando los repintes (realizados en la década de los años 90) que tras su valoración se han detectado cuatro tipos:
1.- Pintura metálica dorada (vulgo purpurina) sobre los dorados originales (y sus pérdidas).
2.- Colorante añil o índigo al agua sobre el temple turquesa original y marmoleados verdosos (y sus pérdidas)
3.- Colorante rojo (no identificado) al agua sobre el temple bermellón, marmoleados rojizos (y sus pérdidas).
4.- Pintura sintética sobre la policromía de los querubines.
Así mismo se ha recuperado todos los frescos posibles.
Para su remoción se han empleado técnicas húmedas a base de hisopos impregnados en diferentes solventes, en función de la naturaleza del repinte, es decir, de carácter polar para los colorantes, y apolares para el resto.
- Limpieza: Eliminación de la suciedad y pátina acumulada, generada por el humo, polvo, y sobre todo, oxidación de las capas de protección, provocados por la acción incandescente de los sistemas de iluminación anteriores
- Reintegración volumétrica del soporte: Las reintegraciones se han realizado con dos materiales, en función del volumen del mismo. La mayoría, han sido realizadas con una resina epoxi especial para materiales porosos. No obstante, algunas superficies han sido reconstruidas con yeso aditivado con resina específica de naturaleza acrílica. En los grandes volúmenes, se ha reforzado con varillas de fibra de vidrio adheridas con una resina apolar.
En el caso de pérdidas irrecuperables, y aprovechando la simetría de la decoración, se han generado moldes de silicona, que han permitido la reconstrucción de la totalidad de los elementos perdidos. Las zonas pulverulentas han recuperado, igualmente, su textura original.
- Recuperación de espejuelos originales: La totalidad de los espejos originales, se encontraba cubierta por espejos contemporáneos. Se han retirado en su totalidad, rescatando los espejos originales que estaban subyacentes. Los espejos originales que estaban quebrados y conservaban todas sus partes, se han adherido, reforzado y vuelto a colocar. Aquellos que se conservaban incompletos, se han reutilizado para espejos más pequeños que faltaban. En los pocos espejos que faltan, se han envejecido espejos nuevos, para simular la apariencia original.
- Reintegración cromática de frescos y yeserías: Las reintegraciones en el caso de los frescos se han realizado con tinta plana al agua, imitando el mismo diseño; partiendo de las zonas existentes y reconstruyendo aquellas zonas carentes de él. En el caso de los dorados, se han reintegrado con tinta plana del tono del bol de armenia, y mediante riggattino con mica en polvo, mineral dorado de máxima estabilidad que integrará las reconstrucciones en el conjunto de las yeserías. Las policromías se han ajustado con pigmentos al barniz.
- Completado de la decoración de la boca del camarín con el retablo: Se ha completado la cornisa del arco del retablo por los laterales del mismo. Esta zona, muy visible desde la nave central, estaba desnuda, ya que, en su origen, existía una puerta con cristales que completaba el perfil o contorno del camarín. Se ha continuado con un friso que continúa las zonas conservadas.
- Protección final: Se ha aplicado una capa de protección acrílica para las yeserías, y dorados, que homogeinizan, protegen y aíslan la totalidad de la superficie del camarín, pero permitiendo una adecuada transpirabilidad del muro.
La Venerable Cofradía de María Stma. de la Aurora continuará con los Cultos en honor a su titular siguiendo el siguiente programa: CLICK AQUÍ
Imágenes de la Presentación y conferencia del proceso de restauración del camarín de María Stma. de la Aurora: VER AQUÍ
Foto: paseillo.es